Después de Ucrania, la realpolitik será el nuevo statu quo intervencionista
Entre el cansancio de la guerra y la incapacidad del gobierno de EEUU para pagar las facturas de la guerra, la realidad va a salir a la luz aunque a Washington no le guste.
Entre el cansancio de la guerra y la incapacidad del gobierno de EEUU para pagar las facturas de la guerra, la realidad va a salir a la luz aunque a Washington no le guste.
El programa de préstamo estudiantil se está sumiendo en el caos y la administración Biden no sabe qué hacer. Además, el valor de la educación universitaria sigue bajando mientras aumentan los costes universitarios.
Como el endeudamiento de la Fed sigue alcanzando nuevos máximos, es poco probable que la inflación caiga tan rápido como indicaría M2, y el crecimiento excesivo de dinero sigue generando problemas en la economía con pocas mejoras, ya que sólo mantiene vivas a las entidades financieras zombis.
Desde el arancel azucarero original de 1789, la política del gobierno de EEUU ha consistido en subsidiar el azúcar, una política que ha tenido graves consecuencias, entre ellas una crisis sanitaria de obesidad.
El senador Joe Manchin dice que se retira debido a las divisiones legislativas que impiden al Congreso encontrar «soluciones» políticas a los problemas de la nación. En realidad, el Congreso está más unido que el pueblo al que supuestamente representa.
En las dos últimas décadas, la TSA ha demostrado su ineficacia a la hora de proporcionar seguridad real a los pasajeros aéreos. Sin embargo, su creciente incompetencia sólo es comparable a su creciente intromisión en la vida de los viajeros.
Washington nunca duerme cuando se trata de declarar nuevos enemigos de ultramar a los que destruir. El nuevo «eje del mal» está formado ahora por Rusia, Irán y China.
La recién estrenada película «Asesinos de la luna de las flores» muestra lo que ocurre cuando personas con conexiones políticas pueden utilizar el Estado para llevar a cabo actos nefastos. Por desgracia, el fracaso del gobierno es una lección que seguramente se perderá aquí.
Mientras el infame centro de antirracismo de Ibrahim Kendi en la Universidad de Boston implosiona, las doctrinas propugnadas por el centro siguen presentando falsos relatos sociales.
Los americanos han sido alimentados con el mito de que la política exterior de EEUU de 1919 a 1941 fue aislacionista. En realidad, las políticas de EEUU desestabilizaron unas relaciones internacionales ya de por sí volátiles.