Recetas con Rothbard: lo que un pastel de chocolate puede enseñarnos sobre economía
Al estudiar praxeología, algo tan trivial como la receta de un pastel de chocolate puede convertirse en una forma de enseñarnos mejor la economía austriaca.
Al estudiar praxeología, algo tan trivial como la receta de un pastel de chocolate puede convertirse en una forma de enseñarnos mejor la economía austriaca.
Cuando los economistas tratan de analizar la economía, un procedimiento consiste en eliminar el componente «estacional» de los datos para tener en cuenta las tendencias y fluctuaciones. Esto choca con el pensamiento que subyace a la praxeología.
Si bien es cierto que no se puede crear emprendedores en un aula, sigue siendo importante que la gente comprenda cómo funciona el emprendimiento. Nadie explica mejor el emprendimiento que los economistas austriacos.
La obra Acción humana, de Ludwig von Mises, no es solo otro libro sobre economía, aunque su contenido económico es excelente y atemporal. Es un recorrido por una verdad tras otra, construido sobre la lógica y la razón.
La realidad no puede transformarse mediante simples decretos que cuestionan las condiciones del mundo. Para alcanzar la prosperidad económica es necesario eliminar estos obstáculos distorsionadores.
Ludwig von Mises nació hace 144 años. Sus obras maestras sobre economía siguen siendo tan relevantes y poderosas hoy como cuando fueron escritas. Mises sigue siendo la voz más elocuente contra el socialismo.
Por muy «inelástica» que sea la demanda, los precios excesivamente altos no pueden mantenerse indefinidamente sin la intervención humana.
Los economistas convencionales afirman que pueden utilizar modelos econométricos para emular la acción humana y, de este modo, crear un laboratorio económico. Sin embargo, estos modelos no pueden proporcionarnos información sobre la relación causa-efecto.
Al examinar el teorema austriaco de la regresión del dinero, Joshua Mawhorter aborda la afirmación chartalista/TMM de que el gobierno es quien da valor al dinero. Los defensores del chartalismo/TMM carecen del mecanismo de causa-efecto necesario para demostrar sus afirmaciones.
La psicología moderna ha estado en desacuerdo con la praxeología de la Escuela Austriaca, ya que los psicólogos han tendido a ver a los seres humanos como pasivos y reactivos, mientras que los austriacos consideran que la acción humana tiene un propósito.