Las tendencias del oficio
En todo el país, cada vez más jóvenes se dan cuenta de que aprender un oficio es mejor camino que ir a la universidad.
En todo el país, cada vez más jóvenes se dan cuenta de que aprender un oficio es mejor camino que ir a la universidad.
La actual escasez de población en China, Japón y Occidente ha enfriado un poco la exigencia de las élites de que los gobiernos «controlen la población». Sin embargo, los anteriores esfuerzos de control de población por parte de los gobiernos ya han creado graves consecuencias para el futuro.
Se ha vuelto dolorosamente obvio que no revertiremos la actual marcha hacia el estatismo «eligiendo a las personas adecuadas». La revolución violenta tampoco es la respuesta. Tenemos que cambiar la mentalidad occidental, antes de que sea demasiado tarde.
En un veredicto que no ha sorprendido a nadie, jueces de Manhattan han declarado culpable a Donald Trump, tomando una acción legal y convirtiéndola en criminal. Lo más probable es que el veredicto sea anulado en apelación, mientras tanto los EEUU se ha convertido en una república bananera.
Aunque nuestras autoridades legales tratan a los contrabandistas como criminales, en realidad son promotores de la libertad que suelen infringir leyes injustas. Los EEUU se fundó prácticamente sobre el contrabando.
Suiza es un país neutral desde hace unos quinientos años. Suecia también tiene una tradición de neutralidad, pero recientemente ha cambiado su postura, en su propio detrimento.
La reciente venta de armas a Israel por parte del gobierno de EEUU es un recordatorio de que la venta de armas se ha convertido en una parte importante de la política exterior de EEUU, así como en una importante fuente de inestabilidad en todo el mundo.
Fallout, la serie distópica de Prime, no es libre mercado en su caricatura de los negocios. Sin embargo, la serie se presta a ser analizada desde la óptica de la economía austriaca.
Según un artículo de The Atlantic, Washington se está apartando de su anterior compromiso con el «libre comercio». Sin embargo, nunca hubo un «consenso de libre comercio» porque Washington siempre ha buscado un comercio gestionado por el Estado.
Los bancos centrales intervienen para «crear demanda», y luego intervienen para intentar paliar los daños que causaron antes. Se trata de un escenario interminable de destrucción económica.