Derek Chauvin es culpable de homicidio involuntario, no de asesinato

En lo que respecta a las narrativas de los medios de comunicación corporativos, sólo se nos permite mantener una de las dos opiniones posibles sobre el asesinato de George Floyd en 2020. Por un lado, está la postura de que George Floyd era un hombre santo que murió como resultado de un ataque inspirado en el racismo por parte del agente de policía Derek Chauvin. Además, Chauvin mató deliberadamente a Floyd y, por tanto, es culpable de asesinato. En el otro bando está la postura de que George Floyd era un monstruo que sólo murió porque consumía drogas.

La estafa de NewsGuard

En los últimos años, todos nos hemos familiarizado con las campañas de desinformación de centro-izquierda conocidas como sitios web de «comprobación de hechos». La mayoría de las veces, los artículos de fact-check son poco más que artículos de opinión apenas velados que se hacen pasar por informes «neutrales» sobre diversos asuntos controvertidos. Los autores seleccionan un puñado de fuentes que consideran ideológicamente atractivas y presentan esa información como la verdad indiscutible. Cualquiera que contradiga esta «verdad» está difundiendo «desinformación».

Estrategia electoral de Biden: «¡Luchemos tres guerras a la vez!»

El presidente Joe Biden anunció la semana pasada que los Estados Unidos financiaría —y posiblemente libraría— tres guerras en tres partes distintas del mundo al mismo tiempo. Es una política exterior ambiciosa para un presidente que ni siquiera parece capaz de expresar un pensamiento coherente sin la ayuda de un teleprompter.

Casi todas las palabras del discurso de Biden eran falsas, incluida la absurda sugerencia de que «el liderazgo americano es lo que mantiene unido al mundo. Las alianzas americanas son las que nos mantienen a nosotros, América, a salvo».

Cómo la economía de deuda «nos convierte en esclavos del Estado»

En primer lugar, el hombre moderno, que vive en una economía de inflación de precios, en una economía de deuda, tiende a ser corto de miras y reduccionista en su visión. Tiende a ser corto de miras porque necesita llevar dinero a la mesa cada mes. Necesita pagar su deuda.

Por tanto, no puede relajarse como habrían hecho nuestros antepasados en el siglo 19. No tenían deudas. Si algún mes no hay dinero, o tal vez hay un mal año y así sucesivamente, bueno, lo superamos. Tenemos algunos ahorros, y así sucesivamente, superamos el tiempo.

La guerra en Ucrania en perspectiva libertaria

Mi discurso del año pasado aquí en Bodrum sobre el papel de Alemania en la guerra en curso entre Rusia y Ucrania, o mejor y más exactamente: entre Rusia, por un lado, y los EEUU, como jefe de la OTAN, sus diversos vasallos europeos y, en particular, Alemania, y Ucrania y los ucranianos como su apoderado: como sus herramientas prescindibles, idiotas útiles y corderos sacrificables, por otro lado, no ha ido demasiado bien con muchas personas supuestamente libe

El dólar oscila entre dos visiones de explosión fiscal

Explosión fiscal no figura en el diccionario económico. Pero en los mercados de divisas y de bonos este concepto intuitivo ha alimentado a veces una narrativa que impulsa al alza los tipos de interés de EEUU a largo plazo y el dólar en tándem. El enigma que hay que explicar en esos momentos, ya sea a principios de los 1980 o en otoño de 2023, es por qué el dólar se encoge de hombros ante el peligro de inflación que supone tanta tinta roja en las cuentas públicas.

La postura demorada, blanda, del Instituto Cato sobre la última crisis en Oriente Medio

Los alarmantes acontecimientos que tienen lugar en Oriente Medio se están agravando y tienen más que un pequeño potencial para enredar a los Estados Unidos en otra guerra exterior. El ataque sorpresa y bien coordinado de Hamás contra Israel desde Gaza ha sorprendido claramente al gobierno del Primer Ministro Benjamin Netanyahu. Sin embargo, Israel está respondiendo ahora con una fuerza abrumadora, como lo ha hecho en anteriores ataques a menor escala durante décadas.

¿Fue buena o mala la Revolución francesa?

Por varias razones, la Revolución francesa es una especie de test de Rorschach para las personas cultas. Una de las causas de este fenómeno, si se me permite amontonar metáforas, es claramente el problema del elefante y el ciego. Hay tantas partes de la Revolución, tantas etapas, tantos protagonistas, tantas ideas, tantas políticas —a menudo bastante contradictorias— que a veces estamos confundidos no sólo en cuanto a cómo interpretarla, sino también en cuanto a qué parte interpretar.