Mises Wire

Dominion Voting Systems es una empresa privada sólo de nombre. Es una agencia gubernamental de facto que obtiene sus ingresos a través de la explotación de los contribuyentes. Como tal, debería considerarse inelegible para demandar a nadie por difamación.

Un ejemplo: Poner en corto más que el total de acciones en circulación no es perverso o fraudulento, mientras que la venta corta descubierta —dependiendo del contexto— podría serlo.

Scheidel sostiene que la caída de Roma precipitó el tipo de innovación impulsada por la competencia que hizo posible la modernidad en primer lugar. El mayor regalo de Roma a la posteridad es que, al desaparecer, dejó espacio para el ascenso de Occidente.

Los responsables de los confinamientos de covid siguen sin tener una explicación de por qué California y Florida —con políticas de covid tan diferentes— tienen tasas de mortalidad de covid similares. El portavoz de la Casa Blanca sobre el asunto sólo pudo decir que «está un poco más allá de nuestra explicación».

Según el pensamiento popular, es probable que el fuerte descenso de la velocidad del dinero desde junio de 2008 neutralice el efecto de los recientes y fuertes aumentos de la oferta monetaria sobre la inflación de los precios en el futuro. Esto es una falacia.

Si los agricultores del Punjab se presentaran como acomodados, los medios de comunicación los verían como empresarios codiciosos. Pero el aprovechamiento del capital político de la percepción de impotencia les ha permitido ocultar su verdadera condición de buscadores de rentas.

¿Qué significaría para la economía que de un plumazo desapareciera no sólo la deuda con el banco central, sino toda ella?

El cálculo económico prudente se hace más difícil cuando los regímenes legales y reglamentarios están sujetos a frecuentes cambios y a la agitación política.

Los estadounidenses harían bien en no descartar el separatismo sólo porque sus libros de texto de historia digan que es ilegal, racista o traicionero. En cambio, deberían reconocerlo como una herramienta que podría ahorrar muchos dolores de cabeza e incluso vidas.

La amenaza de la «proliferación nuclear» sigue siendo una de las grandes razones —la otra es la intervención «humanitaria»— que se aducen para justificar que el régimen estadounidense y sus aliados tengan un poder ilimitado para invadir Estados extranjeros e imponer sanciones en cualquier momento.