A medida que el panorama político de EEUU cambia rápidamente y los departamentos de economía de las universidades se vuelven cada vez más hostiles, la forma de enseñar la economía de libre mercado cambiará.
La gran expansión crediticia que Alan Greenspan inició hace treinta años finalmente ha seguido su curso. La Fed ya no puede expandir el crédito para luchar contra la recesión que se avecina.
Las compañías hipotecarias y las inmobiliarias son los canarios de hoy. Están en serios problemas, al igual que el resto de nosotros.
Casi cuatrocientos policías locales, estaduales y federales participaron en la debacle de las fuerzas del orden en Uvalde. Noventa y un policías estaduales no hicieron nada. Esto no es sólo local.
Los críticos afirman que la economía de mercado incurre en una «obsolescencia planificada» que fomenta el lanzamiento de productos buenos a los vertederos. En realidad, actividades que podrían parecer un despilfarro son el mejor uso de los recursos.
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La mayoría de los economistas consideran que el PIB es una instantánea de la evolución de la economía. Sin embargo, se entiende mejor como una estadística engañosa que no describe con exactitud lo que realmente ocurre en la economía.
Bombardear propiedad privada es algo malo. Por eso, cuando alguien bombardeó las «piedras guía» proeugenesia y antihumanidad de Georgia, naturalmente condenamos el bombardeo. Pero no pretendamos que el monumento sea algo bueno.
