Mises Wire

Como lo hicieron con Trump, los medios clasifican a Bolsonaro de Brasil como un candidato "odioso", pero nunca trata de analizar seriamente cómo han sufrido los brasileños bajo los regímenes de izquierda.

En este editorial del New York Times de 1971, Murray Rothbard describió cómo, bajo la "Nueva política económica" de Nixon, "el fascismo llegó a Estados Unidos".

Los rascacielos que establecen los récords mundiales de altura no causan pánicos económicos, sino que, en cambio, son una advertencia de que el auge ha alcanzado su punto máximo.

Hemos escuchado de los bancos centrales que hemos estado viviendo en un territorio de crecimiento sincronizado. Bueno, no fue el caso.

El vasto régimen de tortura creado por el gobierno de Bush después de los ataques del 9/11 continúa atormentando a Estados Unidos.

A diferencia de una escuela moralista o un gobierno, los mercados no castigan ni gravan a nadie. Simplemente reflejan las elecciones que hacemos y los valores que tenemos.

Lo último que quiere la izquierda es que la gente entienda que las naciones pobres solo se convierten en naciones ricas con mercados libres y gobiernos pequeños.

Los planes de salud con deducibles altos o "catastróficos" ofrecen una protección real contra desastres de salud. Pero la mayoría de las formas de "seguro" de salud aprobadas por el Estado son en realidad programas de asistencia social disfrazados.

Incluso si podemos observar asombrosas cantidades de progreso económico frente a la creciente intervención del Estado, en una economía relativamente libre, esto siempre puede atribuirse a la resistencia del sistema de mercado y al poder de la innovación y la productividad humanas.

La tremenda máquina de propaganda y adoctrinamiento "progresista" ha tenido éxito en imponer sus tabúes.