Los países han cambiado, pero la historia sigue siendo la misma. Los países más ricos intentan «invertir» prestando dinero a los regímenes africanos, donde el dinero desaparece. Esta vez, China es el gran prestamista.
Con el pretexto de «modernizar» las comunicaciones, el gobierno canadiense está ampliando enormemente su poder para regular las redes sociales y amenazar la libertad de expresión.
Este último conflicto en Oriente Medio es, en última instancia, poco más que una guerra de bandas. Nos oponemos a él por una cuestión de principios.
Para 2023, es probable que los Estados Unidos registre el peor crecimiento del PIB —excluyendo el aumento de la deuda— desde 1929. En otras palabras, el país se encuentra en una recesión encubierta por un gasto deficitario exagerado.
Mientras el infame centro de antirracismo de Ibrahim Kendi en la Universidad de Boston implosiona, las doctrinas propugnadas por el centro siguen presentando falsos relatos sociales.
Aunque la Casa Blanca afirma que la inflación está perdiendo fuerza, lo cierto es que, a menos que el gobierno cambie su imprudente rumbo monetario, la hiperinflación podría estar en nuestro futuro económico.
Es fácil imaginar cómo acabará la guerra Israel-Gaza porque sigue un camino que ya se ha recorrido muchas veces. Lo hemos visto muchas veces durante conflictos entre poblaciones de colonos y poblaciones indígenas en todo el mundo
Naomi Wolf se ha enfrentado a la burocracia médica americana por sus mentiras y mala praxis en el tratamiento del covid.
Los americanos han sido alimentados con el mito de que la política exterior de EEUU de 1919 a 1941 fue aislacionista. En realidad, las políticas de EEUU desestabilizaron unas relaciones internacionales ya de por sí volátiles.
Mientras la guerra hace estragos en Oriente Medio, recordamos lo que Mises escribió en 1949 sobre la guerra y sus terribles efectos.
