¿Es Hungría un modelo para la derecha americana?
Aunque el gobierno del Primer Ministro Viktor Orbán es prometedor para Hungría, se aplican las precauciones habituales. Recuerda que se trata de un gobierno.
Aunque el gobierno del Primer Ministro Viktor Orbán es prometedor para Hungría, se aplican las precauciones habituales. Recuerda que se trata de un gobierno.
Murray Rothbard lo dijo mejor que nadie: el igualitarismo es una revuelta contra la propia naturaleza. Por desgracia, los políticos progresistas están decididos a impulsar regímenes igualitaristas por desastrosos que resulten.
Jörg Guido Hülsmann, miembro sénior, se une a Ryan y Tho para hablar de su nuevo libro sobre la economía de la generosidad, la caridad y la abundancia.
A medida que el gobierno amplía el alcance de la legislación sobre derechos civiles, una de las víctimas es la presunción de inocencia. La nueva regla parece ser «culpable hasta que se demuestre lo contrario».
Según Marx, todas las ideas representan intereses de clase, por lo que no hay lugar para la verdad objetiva. El problema es que los marxistas afirman sostener la verdad objetiva, pero se las arreglan para contradecirse a sí mismos.
Reseñando Reconsidering Reparations de Olúfẹ́mi O. Táíwò, David Gordon y Wanjiru Njoya señalan las numerosas falacias del libro y la falta de una teoría coherente de la justicia por parte del autor.
En su reseña de The Political Thought of David Hume: The Origins of Liberalism and the Modern Political Imagination, David Gordon examina los sistemas de normas éticas. Los misesianos tienen las mejores ideas, por supuesto.
Cuando alguien esgrime el argumento de las «carreteras» para justificar la presencia del gobierno, no señala que el producto final del gobierno es deficiente y a menudo un peligro para las personas que utilizan esas carreteras. Hay una forma mejor.
Christianity Today y otras publicaciones cristianas están promocionando un libro que dice basarse en la «teoría crítica bíblica». Es otra versión del marxismo que no es ni crítica ni bíblica. Es sólo más marxismo.
Los progresistas creen que restringir la libertad individual permite obtener mejores resultados sociales. En realidad, es la libertad individual la que permite que las sociedades funcionen mejor.