¿Existe una doctrina Trump en política exterior?
Ryan y Zachary Yost intentan averiguar si hay alguna filosofía coherente que guíe la política exterior de Donald Trump.
Ryan y Zachary Yost intentan averiguar si hay alguna filosofía coherente que guíe la política exterior de Donald Trump.
La filosofía libertaria se basa en el principio de no agresión, pero una sociedad libertaria también necesita instituciones que ayuden a llevar a cabo esos principios, especialmente para aquellos que son víctimas de agresiones por parte de otros.
Los medios de comunicación tradicionales están intensificando su oposición a la administración Trump y especialmente a Elon Musk. Sin embargo, parece que están utilizando el libro de jugadas de hace ocho años, durante la primera presidencia de Trump.
Ryan McMaken and Bobby Gunther Walsh discuss birthright citizenship historically.
Ryan McMaken y Stephen Gardner debaten sobre la DOGE, la ciudadanía por derecho de nacimiento, la corrupción y el despilfarro en USAID, la descentralización política y mucho más.
Mientras Musk se enfrenta a las agencias federales, el establishment de Washington intenta tacharle de plutócrata no electo que usa el gobierno para ayudarse a sí mismo y a otros ricos a expensas de los pobres. Pero estos calificativos se aplican con mucha precisión al propio establishment.
Incluso si el corazón de esta administración está en el lugar correcto, ¿realmente queremos otro fondo multimillonario o billonario para manejar los ahorros de la gente?
La economía está estancada, la regulación ha impedido al mercado crear el crecimiento que impulsa a la sociedad hacia adelante, y sin embargo el gobierno pregunta a los reguladores cómo crear crecimiento. Sería mejor preguntar al hachero cuál es la mejor manera de sobrevivir sin cabeza.
A medida que la administración Trump hace recortes reales a los programas federales, de repente los opositores al «despilfarro, fraude y abuso» descubren que Trump y Musk van en serio con lo de recortar el gasto. No es sorprendente que a los sospechosos habituales no les gusten los recortes.