Kamala Harris no es una comunista radical, pero eso la hace aún más peligrosa

Últimamente, Donald Trump y su equipo han empezado a etiquetar a su oponente, la vicepresidenta Kamala Harris, como una socialista de extrema izquierda, —incluso una comunista declarada—. La estrategia surge después de una inusual pausa en los mensajes del expresidente y su equipo mientras trabajaban en cómo atacar con prudencia a la vicepresidenta.

El trabajo de una campaña presidencial es hacer que la gente se asuste por lo que le espera al país si el otro bando gana, pero etiquetar a Kamala Harris de comunista conlleva varios problemas.

Mark Thornton

Mark Thornton es Catedrático Peterson-Luddy de Economía Austriaca e Investigador Principal del Instituto Mises.

Invertido, empotrado y colgado para secar

Hola, y bienvenidos a otro episodio del podcast Minor Issues. Soy Mark Thornton del Instituto Mises.

El gran ajuste de cuentas parece seguir el curso que he estado trazando por conjeturas. En otras palabras, el gran naufragio parece estar ocurriendo. Veamos lo que estamos experimentando hasta ahora.

Los tipos de interés parecen estar saliendo de su larga inversión. Mi previsión era que la economía no entraría en recesión cuando los tipos de interés empezaran a invertirse, sino cuando empezaran a revertir la inversión.

La superstición primitiva de nuestra época

A mediados de la década de 2000 surgió un nuevo movimiento intelectual bajo el nombre de «Nuevo Ateísmo». Los representantes de este movimiento se veían a sí mismos como campeones del método científico, del análisis razonado de los hechos basado en pruebas contra las supersticiones místicas y primitivas de la religión organizada y todo el daño social, político y cultural que supuestamente produce.