Dinero y Banca

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Frank Shostak

Mientras que los personajes habituales elogian a los bancos centrales por traer supuestamente la estabilidad económica, el Dr. Shostak explica que su presencia hace que las cosas sean inestables porque rompen la relación entre el ahorro y el préstamo.

Antony P. Mueller

El déficit comercial de EEUU es un problema americano. Es el resultado de un ahorro insuficiente en casa y de un déficit presupuestario cada vez mayor.

Mitch Nemeth

Las medidas de mano dura de Justin Trudeau contra los camioneros que protestan son parte de una guerra mayor de los progresistas contra los mercados de capitales y la privacidad financiera. La gente encontrará formas de resistir a través de las finanzas descentralizadas.

Robert Blumen

El propósito económico de los mercados de capitales es proporcionar un nexo entre ahorradores y prestatarios para la financiación de la inversión productiva, escribe Robert Blumen.

Jörg Guido Hülsmann

La inflación erosiona la moral de forma sigilosa e insidiosa. Sustituye los vínculos sociales por controles gubernamentales.

Garet Garrett

La historia nos dice que el gobierno es en el fondo un falsificador y por lo tanto no se puede confiar en él para controlar el dinero. Esto es cierto tanto para los gobiernos autocráticos como para los populares. 

Bettina Bien Greaves
«Los peores fracasos del dinero, las peores cosas que se le han hecho al dinero, no las han hecho los delincuentes sino los gobiernos».
Murray N. Rothbard

«Mi preferencia sería que todos los bancos centrales estatales fueran cerrados y arrasados, para que el verdadero dinero volviera a ser producido por empresas privadas. Si no, al menos la competencia entre las monedas nacionales debería ser lo más grande posible». —Murray Rothbard, 1993

Robert P. Murphy
Teaser: En esta entrevista con Jeff Deist, el Dr. Murphy nos da una sucinta lección sobre la historia del dinero, la teoría del ciclo económico y los orígenes de la inflación monetaria.
Daniel Lacalle
El patrón oro suponía un límite a la voracidad fiscal de los gobiernos, y su suspensión desató la perversa proclividad de los estados al endeudamiento y a trasladar los desequilibrios actuales a las generaciones futuras.