A medida que la deuda de EEUU se dispara y los bancos centrales extranjeros acumulan oro, un senador de EEUU ha presentado hoy un proyecto de ley para exigir la primera auditoría exhaustiva de las reservas de oro América en décadas. Patrocinada por el senador Mike Lee (republicano por Utah), la Ley de Transparencia de las Reservas de Oro exigiría un análisis completo, un inventario y una auditoría de todas las reservas de oro de Estados Unidos, junto con una mejora de la pureza del oro para que cumpla con los estándares del mercado mundial.
Esta medida también exigirá la divulgación completa de todas las transacciones relacionadas con el oro de América, incluidas las compras, ventas, préstamos, pignoraciones, arrendamientos, permutas y otros gravámenes, que se remontan a 50 años atrás. Estas actividades nunca se han divulgado públicamente.
«Durante más de medio siglo, no se ha realizado una auditoría exhaustiva de las reservas de oro de América. Los americanos deben saber si su tesoro nacional está a salvo y se contabiliza con precisión», afirmó el principal patrocinador, Lee.
«Eso significa aprobar la Ley de Transparencia de las Reservas de Oro, abrir Fort Knox, las instalaciones de la Casa de la Moneda de EEUU y el Banco de la Reserva Federal de Nueva York a una auditoría, y luego hacer públicos los resultados», afirmó en un comunicado de prensa en el que se enumeraban las personas y grupos que apoyaban la medida, entre ellos Money Metals Exchange y Sound Money Defense League, la ex candidata a la junta de la Reserva Federal y miembro senior del Independent Institute, Judy Shelton, Club for Growth y el Gold Anti-Trust Action Committee.
«La mala gestión de las reservas de oro de los EEUU por parte del gobierno no se aceptaría en el sector privado y ha minado la confianza», afirmó Stefan Gleason, director ejecutivo de Money Metals Depository.
«Aunque hace décadas se llevaran a cabo auditorías, inventarios, análisis y contabilidades fiables, una auditoría adecuada es un proceso continuo; nunca es algo que se haga una sola vez», continuó Gleason, cuya empresa gestiona una cámara acorazada de máxima seguridad para oro y plata en Idaho que duplica en tamaño al Depósito de Lingotes de los EEUU en Fort Knox.
El proyecto de ley sobre la auditoría del oro surge en un contexto en el que algunos países están cada vez más preocupados por el oro que tienen almacenado en los Estados Unidos o prefieren mantenerlo en su propio territorio. Por ejemplo, los líderes alemanes están pidiendo la repatriación del oro que se encuentra bajo la custodia del Banco de la Reserva Federal de Nueva York.
El excongresista Ron Paul afirmó:
No se debe permitir que la Reserva Federal y el Tesoro operen en secreto, especialmente cuando se trata del activo monetario más importante del planeta, es decir, el oro. Restaurar la confianza en las reservas de oro de América es más importante que nunca, ahora que los bancos centrales extranjeros se apresuran a acumular oro a un ritmo increíble.
Una investigación sobre las reservas monetarias sólidas de América es más relevante que nunca, dado el entorno inflacionista en el que se cierne una deuda federal en EEUU de más de 38 billones de dólares y dado que muchos bancos centrales han estado acumulando oro a un ritmo récord en los últimos años.
Jp Cortez, —director ejecutivo de Sound Money Defense League—, afirmó: «Ha llegado el momento de que haya transparencia en torno al oro de América. Dado que el oro es la forma definitiva de dinero reconocida en todo el mundo, salvaguardar las reservas del Departamento del Tesoro de los EEUU del único dinero mencionado en la Constitución en los EEUU es una cuestión de seguridad nacional».
«Solo una auditoría exhaustiva, y no una maniobra de relaciones públicas como la «visita en directo» propuesta por Elon Musk y otros, será suficiente», concluyó. «Esta situación requiere mucho más que una divertida excursión de un día de los políticos a Fort Knox, West Point y otras cámaras acorazadas del Tesoro de los EEUU».
Para cumplir con sus obligaciones en virtud de la Ley de Transparencia de las Reservas de Oro, la Oficina de Responsabilidad Gubernamental y los auditores independientes externos tendrían acceso a cualquier depósito u otros depósitos públicos o privados donde se guarden las reservas de oro, así como a los registros relacionados. Se prevé que el proceso tarde hasta un año en completarse y se repetiría cada cinco años.
El nuevo proyecto de ley del senador Lee incluye un proceso y un calendario para refinar el oro de América, de modo que cumpla con los estándares de «buena entrega» exigidos por el mercado mundial.
La mayor parte de las reservas de oro de los EEUU se encuentran en forma de lingotes impuros de «monedas fundidas», con una pureza aproximada del 90 %, creados a raíz del decreto del presidente Franklin Roosevelt de 1933, que ilegalizó la posesión de oro y obligó a los ciudadanos a entregar sus monedas de oro a cambio de billetes de papel a un tipo de cambio de 20 dólares por onza —inmediatamente antes de devaluar el dólar y restablecer el tipo de cambio del oro a 35 dólares por onza.
Cortez concluyó: «Aunque no deseamos que los EEUU se desprenda de ninguna parte de su posición en oro, es vital que el oro americano sea totalmente líquido y universalmente aceptado, dada la importancia estratégica de este activo».
El senador Lee ha sido durante mucho tiempo un líder en cuestiones relacionadas con la solidez monetaria. El texto completo de la versión del Senado de la Ley de Transparencia de las Reservas de Oro se puede consultar aquí. Los representantes Thomas Massie, Warren Davidson, Addison McDowell y Troy Nehls presentaron recientemente una versión similar en la Cámara de Representantes.
