Hace 116 años, Erik von Kuehnelt-Leddihn nació en Tobelbad, Estiria, Austria-Hungría. Nacido en la nobleza austriaca, es una figura fascinante del siglo XX. Católico acérrimo y orgulloso monárquico, se definía a sí mismo como «archiliberal conservador» o «liberal extremo». Los que le conocieron, en cambio, le describían a menudo como uno de los hombres más brillantes que habían conocido.
Mientras vivió, fue Académico Asociado del Instituto Mises, donde dio fascinantes conferencias sobre los antecedentes culturales de Ludwig von Mises y las críticas de Mises y Hayek al Estado político moderno. Lew Rockwell calificó de honor personal editar su libro Leftism: From de Sade and Marx to Hitler and Marcuse para Arlington House. Otros dos de sus libros, Liberty or Equality: The Challenge of Our Time y The Menace of the Herd, or Procrustes at Large también están disponibles gratuitamente en nuestra biblioteca digital.
Como sugieren los títulos de esas obras, Kuehnelt-Leddihn era un hombre fuertemente opuesto a las tendencias políticas de su tiempo. Aunque simpatizaba con las «repúblicas no democráticas», veía la democracia de masas como un peligroso camino hacia la tiranía.
Para los seguidores de Ludwig von Mises, su conferencia sobre su herencia austriaca común será de especial interés. Empezando por señalar lo difícil que era describir «un mundo radicalmente distinto del vuestro, un mundo lejano, que en muchos aspectos ya no existe», describe las influencias intelectuales y culturales en el gran hombre. Concluye señalando que Mises «no era un ‘tipo normal’, sino un caballero de la vieja escuela y, sobre todo, un gran erudito que había redescubierto verdades permanentes olvidadas y desinflado nuevas supersticiones. Nunca se rindió. Luchó hasta su último aliento. Tal vez recordaba la primera línea del Himno Nacional Polaco, que escuchó a menudo en su infancia: «¡Polonia aún no está perdida!». Desde entonces ha resurgido dos veces de sus cenizas. Pues bien, la libertad aún no está perdida, si nosotros, como Ludwig Edler von Mises, luchamos realmente por ella».
En un momento en el que se siente un claro vacío intelectual en la derecha, vaciada desde hace tiempo por el conservadurismo moderno y un deseo más profundo de algo más basado en la tradición, la obra de Erik von Kuehnelt-Leddihn merece un renacimiento moderno. Enemigo intelectual acérrimo tanto del nazismo como del socialismo, se enorgullecía de la marca de ser un «reaccionario», término que para él rechazaba la «reductio ad absurdum de la llamada democracia y la dominación de la multitud».
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