Los fiscales federales y otros agentes de la ley están convirtiendo firmas blockchain en filiales del gobierno. El verdadero objetivo es criminalizar lo que en realidad son intercambios legales y privados.
En 1944, el best-seller de F.A. Hayek, Camino a la servidumbre, advertía a Occidente de que las naciones «libres» perderían su libertad a medida que el gobierno se expandiera. Y tenía razón.
Aunque los americanos creen que la Primera Enmienda protege su expresión, el gobierno de EEUU y medios principales se han unido para suprimir la expresión que no coincide con las políticas del gobierno.
Los socialistas y comunistas afirman apoyar los derechos de los pueblos «indígenas». Sin embargo, ese apoyo suena hueco dado cómo la URSS abusó de los pueblos nativos de Siberia, todo ello mientras los socialistas y comunistas americanos apoyaban acríticamente a la Unión Soviética.
La reciente declaración del G7 suena más a «queremos gobernar el mundo» que a «queremos la paz». Otras naciones están cansadas del falso orden basado en reglas de Occidente.
¿Por qué los gobiernos siguen impulsando las CBDC cuando los votantes los odian? Muy sencillo: las CBDC son irresistibles para los gobiernos, a quienes les encantaría vigilar y controlar cada dólar que gastas y cada palabra que dices.
Los dirigentes políticos de los así llamados regímenes liberales occidentales recurren a tácticas autoritarias para sofocar la disidencia legítima. Pero los izquierdistas que se amotinan e incendian tienen vía libre.
El movimiento de derechos trans ha pasado rápidamente a la coerción gubernamental y a la violencia descarada. No hay nada libertario en lo que está ocurriendo en este movimiento hoy en día.
La guerra de la droga del último medio siglo ha encarcelado a millones de personas y ha causado estragos. Lo que no ha hecho es eliminar que la gente use drogas sin permiso del gobierno.
Tucker Carlson ha irritado a las élites gobernantes durante muchos años. Pero, ¿fue su entrevista con Robert Kennedy Jr. demasiado lejos?
