La inflación de precios alcanzó en febrero un nuevo máximo de 40 años. No, no es «culpa de Putin».
Los Demócratas —ya que se supone que están «en el poder»— necesitan algún tipo de chivo expiatorio para la inflación, ya que ésta se está comiendo cada vez más los ingresos de los americanos. Así que ahora culpan a los rusos por lo que ha hecho el banco central.