Las sociedades totalitarias no se vuelven así de la noche a la mañana. Hay signos y etapas reconocibles que muestran cómo una sociedad se desliza hacia ese abismo.
Los progresistas creen que las economías deben ser dirigidas por «expertos» de alto coeficiente intelectual. Pero el éxito de las economías de mercado requiere empresarios con una idea y la voluntad de enfrentarse a condiciones económicas inciertas.
Desde 1981, la tasa de inflación no ha sido superior a la de mayo, del 8,6%. Mientras tanto, la idea de la Fed de «endurecimiento cuantitativo» es reducir su cartera un 0,5% en ocho meses.
La Reserva Federal está subiendo los tipos de interés con la esperanza de revertir parte del daño inflacionario que ha hecho durante más de una década. Por desgracia, la Fed ya ha causado un daño incalculable a la economía.
Los progresistas han impulsado durante mucho tiempo un Estado dominado por una nueva clase de expertos «científicos» que supuestamente no son políticos y sólo persiguen el «buen gobierno». Es una fantasía en la que mucha gente sigue creyendo.
El fantasma de la estanflación está de nuevo entre nosotros, a pesar de las afirmaciones de los keynesianos de que un nuevo brote de inflación reducirá el desempleo. ¿Cuál es la causa?