Los esfuerzos de los responsables políticos de los EEUU para impulsar los precios del crudo y para lanzar un salvavidas a los productores de crudo de los EEUU de alto costo es exactamente lo contrario de lo que los precios nos dicen que el mercado necesita en este momento.
Los daños duraderos y de gran alcance causados por este precedente autoritario superan con creces los causados por el virus COVID-19. El pueblo estadounidense debe decidir por sí mismo cómo y cuándo reabrir la sociedad y volver a su vida cotidiana.
Trump está hilando una narrativa en la que los presupuestos públicos cada vez más grandes, y montones cada vez más grandes de gasto deficitario, crean trabajos y hacen a Estados Unidos «seguro».
Los países más pequeños dependen más del comercio y de la atracción de capitales mediante la reducción de los tipos impositivos. Esto va en contra de la noción de que los «nacionalistas» pueden utilizar la separación política para aumentar las barreras comerciales y aislar una economía nacional.
¿Cómo pueden los paternalistas decir que cuando te hacen más difícil fumar no están interfiriendo con tu libertad? Se les ha ocurrido un razonamiento extraño.
La tarea que las leyes de derechos civiles debían llevar a cabo –la gestión desde arriba de diversos grupos étnicos, regionales y sociales– siempre había sido la principal tarea de los imperios. Los EEUU ahora imponen esto tanto a nivel nacional como mundial.
Durante diciembre de 2019, el crecimiento interanual de la oferta monetaria fue del 5,53%. Esto es menor que la tasa de noviembre de 5,9%, pero fue mayor que la tasa de diciembre de 2018 de 3,90%.