La huelga de la UAW contra los fabricantes de automóviles de EEUU perjudicará a largo plazo a la industria automovilística nacional. Por desgracia, los sindicatos y sus defensores no aprenderán nada de esta debacle.
Los trabajadores automotrices están enfadados por su situación laboral y están en huelga para reclamar salarios más altos y una semana laboral más corta. Su enfado está mal dirigido.
Con la actual maraña de términos políticos, es difícil discernir qué es «libertario» y qué no lo es. La libertad económica y los derechos individuales deben encabezar la lista.
Mientras los políticos de todos los niveles debaten el pago a los americanos de raza negra de «indemnizaciones» por la esclavitud, un estudio minucioso de las diferencias de riqueza entre grupos étnicos demuestra que los prejuicios étnicos explican muy poco. Hay otros factores más importantes.
Tras las malas noticias sobre la inflación, la Reserva Federal está subiendo los tipos de interés. Sin embargo, un tipo más alto inducido por la Fed no es lo mismo que un tipo de interés decidido por el mercado.
La reciente orden ejecutiva de la gobernadora de Nuevo México suspendiendo los derechos de armas en parte del estado demuestra no sólo su ignorancia de la ley, sino también su mayor ignorancia del origen de los derechos.