El imperialismo de EEUU a través del lente de Nación, Estado y economía de Mises
Los americanos que fueron a luchar en la Primera Guerra Mundial —y los políticos que los enviaron allí— no eran menos imperialistas que los alemanes.
Los americanos que fueron a luchar en la Primera Guerra Mundial —y los políticos que los enviaron allí— no eran menos imperialistas que los alemanes.
El crecimiento intermensual de la oferta monetaria pasó a ser positivo en marzo, y el crecimiento monetario alcanzó su nivel más alto en dos años. Está claro que a la Fed no le apetece más «endurecimiento» monetario.
El furor entre las élites académicas y los multiculturalistas es la insistencia en que no se puede aplicar el análisis económico occidental a culturas diferentes. Sin embargo, Ludwig von Mises insistía en que la economía es una ciencia universal.
Mientras la economía de EEUU se tambalea y la gente sigue atrasándose, la teoría austriaca del ciclo económico ofrece la mejor explicación de lo que está ocurriendo, aunque las élites no quieran oírla.
Los progresistas afirman que los lucros corporativos son una de las causas de la inflación. Sin embargo, si la inflación aumenta los precios al consumo, también provoca un aumento de los costes de producción. Esa no es una receta para la lucratividad.
En muchas escuelas del país, los alumnos se enfrentan cada día a agresiones tanto físicas como emocionales, de modo que la escuela se convierte más en una cuestión de supervivencia que de prosperidad.
La visión naïve de la expansión fronteriza de América suele omitir la mayoría de los detalles sobre cómo el gobierno central de EEUU —desde principios del siglo XIX en adelante— se interesó mucho por cómo se colonizaba la frontera de EEUU y por quién lo hacía.
Los políticos, apoyados en charlatanería económica como la teoría monetaria moderna, creen que no tienen limitaciones fiscales cuando nos imponen sus visiones. Pero los costes son reales y la realidad económica se impone tarde o temprano.
La anarquía no es caos, y el Estado no pone orden.
A pesar de que la gente abandona California y Nueva York en masa debido en gran parte a sus ruinosos impuestos, las autoridades estaduales siguen la pista de estos emigrantes y les exigen que sigan pagando los impuestos estaduales. Directo de Orwell.